¡Hola, Autonauta! Nos volvemos a encontrar y esta vez nos encargaremos de despejar todas tus dudas sobre el rendimiento y funcionamiento del termostato.

Vayamos por partes y empecemos explicándote por qué le debes de prestar especial atención a esta pieza y de qué manera ayuda al buen funcionamiento del motor de tu auto.

¿Por qué es importante el termostato?

El motor de tu carro es como el corazón. Si no está en buenas condiciones o si no le prestas la debida atención, simplemente no arrancará. Una de las claves para mantener tu motor en buenas condiciones es controlar su temperatura. Aquí entra a tallar el termostato, cuyo trabajo ayuda a regular el flujo de agua o refrigerante al radiador.

En simples palabras, el termostato cierra el paso y no permite que estos líquidos fluyan hacia el motor hasta que alcancen la temperatura ideal especificada por el fabricante.

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Entonces, ¿Cómo sé si el termostato de mi automóvil está funcionando bien? Pues aquí te explicamos todo lo que necesitas saber para conocer el estado del termostato de tu auto, los motivos que causan que falle y la forma en que tienes que cambiarlo.

¿Cuáles son los síntomas de un termostato defectuoso?

Te brindaremos una guía rápida de las cuatro principales señales que te pueden indicar que algo está mal con el termostato de tu auto.

Sobrecalentamiento

Cuando el termostato no funciona como tiene que ser, no sabe cuándo dejar pasar el líquido refrigerante para enfriar el motor, causando que la temperatura aumente demasiado y provocando que el motor se averíe.

Esta situación se da también porque el refrigerante alcanza la temperatura de funcionamiento demasiado rápido y se calienta por encima de lo ideal. 

No se calienta lo suficiente

Por otro lado, puede pasar lo contrario. Este problema se da porque el termostato no se mantiene cerrado el tiempo suficiente para retener la temperatura ideal.

También puedes identificar este problema porque el motor de tu auto solo alcanzará la temperatura de funcionamiento tras recorrer muchos kilómetros o incluso no calentar nada en absoluto.

Ya sea que se trate del primer o segundo caso, el termostato está permanentemente cerrado o permanentemente abierto. Este tipo de situaciones pueden ocurrir tanto con el termostato clásico como con el termostato controlado por mapa.

Subidas y bajadas de temperatura

Te puedes dar cuenta de esta situación por las medidas anómalas que tiene la aguja de temperatura. Este problema está ligado al termómetro del termostato, el cual no lee la temperatura correcta y tiende a abrirse o cerrarse el momento erróneos.

Este tipo de indicador se encuentra instalado en carros modernos. Si no dispones de este, será muy difícil reconocer el fallo y es muy probable que te des cuenta cuando sea demasiado tarde.

El motor no funciona de la misma manera

El motor de tu coche requiere de un rango de temperatura que va entre los 85ºC y 95ºC para su buen funcionamiento. Algunas personas creen que el motor trabajará bien sin un termostato. ¡Qué equivocados están! Esto traería como resultado que el motor se esfuerce más y se termine desgastando más rápido de lo normal.

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Ahora que ya sabes identificar las posibles señales que producen un termostato dañado, veremos cuándo es el momento adecuado para poder reemplazarlo.

¿Cuándo cambio el termostato?

No existe una fecha exacta para el reemplazo de esta pieza, aunque es recomendable sustituirlo al mismo tiempo que realizas cualquier modificación asociada al circuito refrigerante, como: la sustitución de la bomba de agua, tubos flexibles o el radiador del motor. Pero si el termostato permanece atascado, sí es necesario un pronto cambio.

Si tu auto cuenta con un medidor de temperatura, puedes intentar conducir hasta el taller más cercano con un termostato defectuoso o sin abrir. Siempre debes vigilar la temperatura para que el motor no se caliente demasiado. Hacer lo siguiente te puede ayudar en este caso:

• Aparca el coche y deja que el motor se enfríe (es más rápido con el capó abierto).
• Pon el ventilador interior en “ECO” o apaga el aire acondicionado, pon la temperatura y el ventilador al máximo para enfriar el motor.
• Conduce de noche, ya que las temperaturas exteriores son más bajas.
• Quita el termostato.

La mejor forma de cuidar el termostato es realizando el mantenimiento adecuado a todo el sistema de refrigeración de tu coche. Recuerda que este sistema puede presentar fallas a determinados kilómetros de recorrido.

Otra forma de cuidar el termostato es eligiendo repuestos de calidad y originales para la implementación de tu auto. Te invitamos a visitar tu web favorita en donde encontrarás un catálogo surtido con todos los implementos que necesitas.