Como ya sabemos, el embrague dentro de su sistema cuenta con una parte importante llamada prensa de embrague. Esta, tiene como función conectar y desconectar la transmisión mediante la aplicación de la fuerza compresora requerida, pero ¿Cuáles son las partes de la prensa de embrague? En este artículo te lo explicaremos todo.
Plato compresor
El plato compresor, es uno de los componentes de la prensa de embrague y está expuesto a grandes cargas térmicas. Es así como dependiendo de las condiciones de su uso y del grado de carga al que se encuentre sometido, soporta intensas temperaturas que fluctúan entre 120 y 400 grados Celsius.
Sumado a ello, el plato compresor tiene una masa que es menor en comparación con el volante de inercia y además se ve perjudicado por la carcasa del embrague que dificulta la evacuación del calor.
Es por ello que es importante tomar en cuenta la elección adecuada de la forma, del tamaño y del material del plato compresor ya que juega un papel importante en la duración de vida de los forros del embrague.
El plato compresor se encuentra unido a la tapa del embrague por medio de resortes de lámina de acero inoxidable y esos resortes tienen como primera función la de centrar el plato compresor en la carcasa del embrague.
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Asimismo, los resortes de lámina son componentes sensibles y cumplen la función de generar un movimiento de elevación del plato compresor.
Es importante que, al momento del montaje y desmontaje del plato de presión, deba ser tratado con mucho cuidado, ya que si este cae al piso los resortes de lámina pueden ser dañados resultando doblados o incluso rotos, motivo por el cual ya no servirá.
Resortes o Muelles helicoidales
Los resortes o muelles helicoidales son elementos de espiras de alambre normalmente redondo, forma cuadrada o rectangular; que se montan entre dos partes mecánicas con el fin de amortiguar impactos o de almacenar energía y devolverla cuando sea requerida.
El disco de embrague está fijado por el disco de presión, que aprieta contra el disco de embrague, haciéndolo por medio de la fuerza de los muelles helicoidales.
Cuando se monta y cierra la tapa del embrague, los muelles helicoidales comprimen los componentes y el disco de embrague, como ya se ha dicho, queda fijado por el plato compresor y los muelles helicoidales.
Unas palancas se encargan de hacer retroceder el plato compresor, que dispone de un mecanismo al que están sujetas las palancas. Y la tapa de la carcasa del embrague tiene unas levas sobre las que se apoyan las palancas.
En el proceso de desembrague, el cojinete de desembrague presiona las palancas hacia abajo y el plato compresor libera el disco.
Muelle de plato o diafragma
En principio en el embrague de diafragma todo funciona de forma similar, pero de un modo mucho más eficaz y, al mismo tiempo, con menor complejidad mecánica. Por lo tanto, no es un milagro que durante las últimas décadas haya desplazado ampliamente al embrague de muelle helicoidal y que haya conquistado también el sector de los vehículos industriales.
La construcción de un embrague de diafragma es la siguiente: volante de inercia, disco de embrague, plato compresor, diafragma y finalmente la tapa del embrague, a la que se encuentra sujeto el diafragma.
Cuando se atornilla firmemente la tapa, el diafragma se tensa y comprime el disco de embrague entre el volante y el plato compresor, exactamente igual a lo que sucedía con el embrague de muelle helicoidal.
Pero lo que ahora falta es el mecanismo de palancas para el desembrague.
Aquí es donde se puede ver la ventaja principal del diafragma: es elemento transmisor de fuerza y, al mismo tiempo, palanca de desembrague.
Cuando el cojinete de desembrague presiona las lengüetas elásticas, el borde exterior del diafragma báscula como un balancín, en sentido opuesto al movimiento de desembrague del disco de presión.
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